El estudio del idioma latín y de su literatura permite a los estudiantes de desarrollar capacidades fundamentales en la vida cotidiana y en el mundo del trabajo. Junto a la habilidad de resolver problemas, el latín es la llave para comprender la historia, los idiomas y el mundo occidental.
El estudio comienza en el primer año de Liceo Científico y Lingüístico con gramática y traducción, herramientas que ayudan a desarrollar la memoria y la lógica y que permiten además, el enriquecimiento del léxico en italiano y en español.
El latín ofrece también la posibilidad de comprender la estructura morfosintáctica de un discurso y entender la relación entre las lenguas romances.
La comprensión del texto continúa en los siguientes años, con la profundización de la gramática y el estudio de la literatura, que se aprenden a través de una comparación entre los textos y los contextos.
Así como la historia, el latín ayuda a comprender nuestra sociedad y cultura, atesorando el legado que nos dejaron grandes autores como Virgilio, Cicerone, Seneca y Livio, entre otros.